martes, 28 de febrero de 2012

159.

Dado que mis ganas de verte son inversamente proporcionales a las probabilidades de que aparezcas, y las apariencias pueden decir, pero no confirmar, dudo que hayas conseguido despegarte de su sonrisa. Y del sonido de su voz. Qué raro, se pregunta ella: Apenas hemos empezado y ya quiero que termine. Pero claro, vuelves a pegarte a su cuello y se le olvida la estupidez que pensó hace unos segundos.
Y es que sientes que estás tan lejos de todo que se te hace fría la distancia. Tanto, o más, que tus palabras, que parecen témpanos de hielo, y transmiten frío a la nada ¿Querías más espacio?

Por lo menos ya no puedes dañar a nadie.

domingo, 26 de febrero de 2012

158.

Puedes guardarlo todo, todo lo que sientes, dentro muy dentro de ti. Bajo capas y capas de orgullo que protejan algo que no deseas que salga a la luz. Mientes, y dices que no sientes nada, porque la nada, a nadie le interesa. Mas cuando alguien dice lo mismo, tú le conoces demasiado como para saber que debajo de ese nada hay un montón de palabras que desean ser escuchadas. Y luego lo piensas, y caes en que tu nada, bajo la que se esconde todo, a pasado desapercibida ante esas personas que deberían conocer tus miedos, tu orgullo, e intentar ir quitando capas hasta llegar a ella.
El caso es que últimamente ella pregunta, pero ninguna persona le pregunta a ella.
Y se supone que todo el mundo tiene alguien que pregunta.
Pero, en esto, como en todo lo demás, no es más que un eslabón perdido. No pertenece aquí ni allí, a nada ni a nadie. No necesita a nadie. Nadie la necesita a ella.

viernes, 24 de febrero de 2012

157.

Son fronteras, aparentemente cercanas, las que te parecen únicas oportunidades de salir de pesadillas que se repiten, por las que te niegas a dormir. No necesitas enemigos, bueno, no más. Dicen que no te entienden, pero si ni siquiera se han parado a oírte, ¿cómo pueden juzgar ya? Les han llenado de absurdas ideas que les controlan, les han manipulado, y tú te has quedado aislado. El raro, el diferente, el excluido. No recuerdo cuándo te vi por primera vez, sólo que pedí que no fueras como ellos.

Y, no me conocías, pero tampoco defraudaste.DN.

miércoles, 22 de febrero de 2012

156.

Las cosas habían cambiado. Gente le había fallado, y había sido decepcionada por ella. Se hacía daño reprochándoselo una y otra vez. Tu culpa, tu culpa. Quería saber si en el mundo había alguna verdad. Un rayo de esperanza que tenía le decía que sí, que había cosas buenas. Pero la realidad seguía demostrándole lo contrario.


Pero era verdad, no veía más que reflejos.

jueves, 16 de febrero de 2012

155.

Ella pensaba que las rupturas eran dolorosas, pero veía a mucha gente decir adiós a personas que se convertían en pasado, y otras se convertían en presente a los pocos días. No sabía cómo había tanta facilidad para esos "te quiero", tanta rapidez para esos "para siempre", y tantos parecidos en esos "no hay nadie como tú". Para ella había una persona que cumplía todo eso, pero a la que no podía confesárselo. Distancia y timidez eran dos factores en contra. Pocos, pero importantes. La diferencia estaba entre las cosas que ellas pensaba, las que quería decir, y las que realmente decía. Se ahorraba muchas, por miedo a hacer daño a personas que ya lo habían hecho. Pensaba que era injusto decir cosas malas sobre otra persona.
Pero no peor que hacerlo sin que esta estuviera presente.

Por aquello de poder defenderse y tal.

lunes, 13 de febrero de 2012

154.

Paredes reflectantes, imágenes reiterativas. No hay fuerzas, y el suelo se convierte en un pequeño refugio. Sirenas en la calle, ¿qué está pasando? Que el mundo se ha estancado en el vacío, que a ti ya te había consumido cuando ocultaste tus pequeñas pupilas entre tus párpados. Murmullos, algunos cercanos, y otros no tan próximos como preferirías. Piensas que la palabra inutilidad fue específicamente creada para tu persona. No sientes frío, no sientes nada, todo escondido en tu mirada, quien a su vez está escondida en la sombra que crean tus pestañas. "Cerca del precipicio" dice la canción "en plena caída" piensas tú. Lo que tendría que haber sido a tu manera dependió de la suya. Hay muchas luces, cabezas vacías, y palabras sinceras. Tanto que esa sinceridad duele. Esa verdad escondida, donde esperaba para salir, y herir a su paso. Moteles de carretera historias de habitaciones, palabras ausentes, gestos presentes. Mentes mareadas a causa del alcohol, recuerdos borrosos de alguien pequeño. Tanto, que sólo una persona se detuvo para descubrir lo grande que era en verdad.
Y ella agradeció su llegada; lloró su marcha.

sábado, 11 de febrero de 2012

153.

A veces, las cosas tienen fácil solución. Pero nos negamos a verlas, por miedo...a que acabes confundido, y a que todo cambie por una mala decisión.

miércoles, 8 de febrero de 2012

152.

Múltiples diferencias en sólo una persona. ¿Defectos? Muchos. ¿Virtudes? Incontables. Se supone que lo único que sientes es su compañía. Y lo siento,constante, aunque esté a media hora de aquí. Es luz, es calor, es esperanza, es amistad. Es palabras necesarias, es lógica y misterio. Es inteligencia y ternura. Es mis mejores minutos, es mi enigma. Y a la vez mi respuesta. Despistado, algo torpe, realista, insistente...
Me faltarían palabras...horas para decir todo lo que es. Pero nunca dudaría de que es un fallo.
Él es mi acierto. Alguna vez tenía que dejar de equivocarme.

martes, 7 de febrero de 2012

151.

Cómo jode ver que tú no consigues algo que deseas, y otro lo hace sin más, ¿eh?
Pues si no lo sabéis, os aseguro que os jode eternamente. el día

lunes, 6 de febrero de 2012

150.

El sol la cegó por un momento, antes de bajar la mirada y ver pequeñas manchas de colores a causa de haber mirado al astro rey directamente. Cuando se pasó, vio que Josh iba hacia ella, apartó la mirada, azorada, y echó a caminar en dirección contraria. No tardó en alcanzarla, sintió como si sus pies se elevaran del suelo cuando él le tocó el brazo.
-¿De qué huyes?-dijo con esa sonrisa. Esa sonrisa que hacía cuarenta y ocho horas no veía en ese rostro.
-No huyo...ahí hacía frío-se defendió como pudo.
-Pensé mucho en lo que me dijiste.
Ella no contestó. Sintió el rubor en sus mejillas. Siempre hablaba de que no era bonita, y nadie le convencía de lo contrario, por eso siempre estaba en el bosque, siempre estaba consigo misma. Y, por alguna extraña razón, Josh había llegado ella, y había entrado en el bosque, en su bosque, y en su pequeño mundo.
-Ah...-añadió finalmente mirando al suelo.
-¿Sabes qué conclusión saqué?
Moría por saber qué pensaba, pero a la vez sabía que su respuesta podría doler, por lo que se quedó en silencio, esperando que no contestara, pero Josh si tenía algo que decir lo decía.
Cogió su cara entre sus manos, y la miró fijamente a los ojos, ella al principio se negaba a fijar su mirada en la de él; pero una vez lo hizo, no pudo apartarla, hipnotizada por sus ojos castaños.
-Pienso que no debes torturarte. Que eres bonita tal y como eres, no. No eres bonita, eres preciosa, y si dejas que te convenzan de lo contrario es porque no se han fijado en ti. Además, no es sólo por lo guapa que eres, eres  una persona increíble. Y eso cuenta mucho más. Porque, al fin y al cabo, ¿el físico es tan esencial? ¿Acaso el físico de una persona va a estar presente cuando la necesites? Cuando necesites un abrazo suyo, y que te diga que está bien, que esté allí. Eso una fotografía no puede solucionarlo, ni lo guapa que ella sea. Eso es una virtud tuya. Encontrarás a alguien que te sepa querer por lo que eres, porque sabes cuidar de lo que quieres. Que te importa más los sentimientos de esa persona más que los tuyos. Eso alguien sabrá valorarlo.
Se quedó unos segundos callados, acariciando sus mejillas con los pulgares. Ella vio una luz en sus ojos que pocas veces había visto. Sólo cuando miraba a Pam, la chica que ocupaba el pensamiento de Josh.
-¿Crees...crees que ya he podido encontrar a esa persona?-se aventuró a preguntar.
Él pareció relajarse. Haciéndola sentir que aquello era una llamada a la realidad, que quería despertarla para que viera lo no tan obvio, pero al fin y al cabo, cierto.
-Sí...creo que sí.

domingo, 5 de febrero de 2012

149.

Si el destino está escrito no sé qué hacemos que no intentamos averiguar cuál es el nuestro y nos deshacemos de tanta intriga. ¿Acabaré a su lado? ¿Me darán el empleo? ¿Ganaré? ¿Perderé? Creemos vencer a la lógica aunque es una lucha sin fin. Apostamos por el espectáculo porque demostrar simplemente que puedes es escaso. Saludamos por educación, y no todas las despedidas saben mal. Que las estadísticas estén en tu contra no quiere decir que vayas a fallar. Si están ahí, es porque alguien lo ha conseguido, aunque más no lo hayan logrado. Y es verdad que las derrotas te hacen más fuerte, pero no las puedes celebrar.

También por eso suelen costar.
Me están matando los exámenes. Lo siento mucho.

miércoles, 1 de febrero de 2012

148.

Deshojar margaritas, porque esperanzas hay pocas, y decides ponerlas en lo primero que encuentres. Paseos en la playa bajo la luz de la luna, única compañía de almas solitarias. Ligeras sonrisas cuando el agua roza los dedos de los pies de la chica. Se divierte indiferente ante la mirada de un grupo de chavales que pasa a su lado. Sólo uno se fija en ella, mientras los otros tres se ríen de "esa loca", que tiene probablemente los ojos más bonitos de todo Málaga. Pero ella sigue sin pensar que el agua ya moja la parte baja de su vestido. Indiferencia, alegría, y esa chispa que cautiva los ojos de él.
Deshojar margaritas es algo que probablemente no funcione, pero confiar en las casualidades es algo bastante optimista.